martes, 27 de julio de 2010

Vegetales al micro

Este es un post rapidón que practicamente es un consejo.

Todos sabemos que necesitamos comer de manera balanceada por nuestra salud, que necesitamos comer proteinas en las 3 comidas grandes, que tenemos que suplementar con verduras o ensalada, y que hay que tratar de que cada comida tenga colores variados.

Yo siempre lo pienso y lo recuerdo cuando estoy cocinando, pero a veces me da pereza ponerlo en práctica. Siempre me ha dado pereza hacer ensalada, si me gusta comerla, me siento bien conmigo misma haciéndolo, pero lavar lechuga y pelar pepinos me da taaaanta pereza que a veces no lo hago, o compro poquito de cada cosa para quedarme sin vegetales de ensalada a media quincena y así justificar el no hacerlos.

La alternativa? Vegetales al vapor, o hervidos. Son ricos, y depende de como uno los haga pueden ser deliciosos!

Yo por lo general hago bróccoli con zapallo, y claramente le agrego cebollino porque hace que sea infinitamente más delicioso.


La manera en que los preparo, y mi consejo para todos y todas las que no lo preparen, es  hacerlo en microondas.

Mi ollita arrocera de microondas es una verdadera salvatandas. Casi nunca la uso para arroz, pero si estoy cansada, o apurada, o simplemente con pereza, la uso para cualquier vegetal que tenga en la refri. Zanahoria, zapallo, bróccoli, chile dulce, berenjena, hongos, lo que sea!

Basicamente se cortan los vegetales en el tamaño deseado, se les agrega especies (sal, pimienta y un poquito de sazón completa). Depende del vegetal se le puede agregar un poquito de agua, y cuando no soy sólo yo, le agrego mantequilla, hace que sepa mucho más rico (pero no es tan light).


Hay que poner atención a un par de cosas:

1. Los diferentes tiempos de cocción de cada vegetal. A veces hay que poner uno unos minutos antes de agregar un segundo (si lo hay), para que ninguno quede sobrecocido.

2. Es necesario cocinar los vegetales por ratitos. Yo los pongo 5 minutos, reviso, y dependiendo de como estén calculo el otro rato. Además, el cebollino siempre se lo agrego después de los 5 minutos para que quede apenas cocinado.

Uno después le va agarrando el toque y no necesita ni pensarlo ni revisarlo. Yo a veces estoy muy cansada y llego tarde, entonces meto una chuleta ahumada en el hornito, vegetales en el micro, y buenas noches. En la mañana mi almuerzo para llevar al trabajo está listo! Lo mismo aplica para cuando hay mucho que hacer: pongo la comida y subo a la compu, cuando suena el hornito bajo y me sirvo.

Ultimamente lo uso porque por cocinar alguna otra cosa rica no tengo tiempo o energía para el complemento, y es importante! Es un esfuerzo pequeño, así que no los quiero ver comiendo arroz y tortas de carne nada más!

Delicioso Pollo al Chipotle con bróccoli, zapallo y cebollín.

lunes, 26 de julio de 2010

Crema de pulpo y tomate

Este post no tiene NADA relacionado con el Mundial o el Pulpo Paul, esta es una receta que me encontré hace 10 mil años acá (está en inglés y diferente a como la tengo acá).


La receta se leía super complicada, yo simplifiqué un poco los procesos y además con las fotos creo que queda bastante claro, si no entienden algo me avisan.

Tengo que confesar que cuando empecé a hacerla no tenía una idea clara de como iba a resultar. Tanto ajo! Tanta cosa! Además pensaba que iba a ser complicada y super dificil. En realidad se dura un rato haciéndola, pero no es complicada ni dificil, y el sabor es fuerte pero bien balanceado. Me encantó la textura y me parece practicamente un plato perfecto! Cuando lo hice me quedó suficiente para 6-8 platos, y almorcé lo mismo 3 días seguidos, y lo cené como 2 veces, y el último día tanto en el almuerzo como en la cena, cuando me serví el plato me dije a mi misma "qué pereza! otra vez pulpo..." y en el momento en el que sumergí el pan en la crema picantita y la probé, hasta me puse triste pensando en que se me iba a acabar. Se los juro! Suena tonto, pero es verdad!

Hace 6-8 platos deliciosos, aciditos y picantitos.


Ingredientes:

• de 1 a 1 1/2 kg. de pulpo limpio
• 2 cabezas de ajo
• 8 ajos (suena como demasiado, yo se, pero van a ver que queda bien)
• 2 cebollas medianas
• 10 tomates medianos-pequeños (si tienen grandes usan un poco menos, no es tan importante que sea una cantidad exacta)
• 2 tzs de cerveza
• Un montón de agua (ahí les voy diciendo cuanto hay que ir usando)
• 2 ramas de perejil
• 2 cdtas de culantro en polvo
• Unos 30 granos de pimienta negra entera
• 1/ tz de aceite de oliva
• Sal al gusto
• Pimienta cayena al gusto (o pueden usar hojuelas de chile picante, pero más rica la pimienta)

Preparación:


1. Lavamos y pelamos las 2 cabezas de ajo y las cebollas. Las ponemos en un recipiente para el horno las dejamos unos 20 minutos a unos 400ºC. Acuérdense de usar el hornito y no el horno grande cuando son cantidades pequeñas.

2. Una vez que la cebolla y ajo están dorados, los retiramos del horno. Llenamos una olla de agua y la cerveza, colocamos dentro el pulpo limpio, la cebolla y ajo horneados, el perejil, el culantro, la pimienta cayena, y los granos de pimienta negra. Esto lo dejamos hervir por unas 1 hora y media o 2 horas, lo sacamos del fuego y lo dejamos enfriar todo en la olla (hay que tener cuidado de que el pulpo no quede completamente cocinado porque mientras está enfriándose se va a cocinar otro poquito).

3. Una vez que el pulpo está hervido, en otra olla hervimos los tomates partidos en pedazos grandes (pueden ser mitades o cuartos) con 4 dientes de ajo, en 6 tazas de agua.


4. Tomamos el tomate hervido y los ajos y los licuamos con 1 1/2 tzs del caldo.

5. Calentamos el aceite de oliva en una olla y le agregamos los 4 ajos que quedan.

6. Una vez dorados los ajos agregamos la salsa de tomate licuada (pringa un montón, así que hay que tener cuidado). Revolvemos un montón hasta que deja de hervir como loco y lo dejamos unos 30 minutos mientras baja el caldo.



7. Por otro lado, mientras hierve la salsa separamos el caldo, el pulpo y los vegetales. El caldo lo ponemos a hervir junto con la salsa de tomate en fuego medio una media hora hasta que baje a unas 3 tazas (se puede combinar con la salsa de tomate pero dura mucho más bajando, así que mejor no). Se licúan los vegetales.

8. Se corta el pulpo en pedazos medianitos, o al gusto realmente, si quieren los dejan grandes.

9. En una de las ollas en las que se están hirviendo los caldos agregamos todos los ingredientes: caldo de tomate, caldo de pulpo con cerveza, vegetales licuados y pulpo. Terminamos de condimentar el caldo al gusto con la sal y pimienta cayena. Y listo!


Calientita y con buen pan ciabatta =D!!! que ricooooooooo!!!!!!!

jueves, 22 de julio de 2010

Mac & Cheese

Este plato es en principio una cacerola de fácil preparación cuya característica principal es que es sumamante versátil.


Muchos de nosotros conocimos el Macaronni & Cheese por los paquetitos Prince. Cuantas veces vi yo a mi mamá salir al super y le grité "traiga coditos prince con quesoooo!!!". Me encantaban, amaba llegar a la casa después del colegio y hacerme un paquete de coditos o tornillitos con jamón picado y sentarme a ver Sailor Moon =D.

Pues bueno, me encontré una receta para  hacerlos, e hice la salsa sola de la manera medio tradicional, porque tradicionalmente se hacen horneados (porque es una cacerola), pero esta es la manera tradicional para mi que conocí el plato como pasta corta con una salsa de queso hecha con el polvillo amarillo que venía en la caja (y queso amarillo, siempre le echaba un par de tajadas de queso amarillo procesado). La hice así pelada porque quería primero probar la salsa sola, antes de empezar a meterle mano.

Y entonces esta es la receta "original", pero así no más no es tan rica, es pesada y un poco monótona (aunque el sabor del queso es un éxito). Volví a hacer la receta con salchicha y bróccoli, y quedó de rodar en el piso de rica, peeero no le tomé fotos =(, así que voy a poner la receta con esa variación deliciosa de salchicha y bróccoli, pero con las fotos de la receta original, les va a gustar, es perfecta para el niño o niña que hay en cada uno de nosotros, y si tienen hijos, se van a chupar el plato!

Esta receta es para 3 porciones, apenas para una bolsa de pasta corta.

Ingredientes:

• 1 paquete de tornillitos o pasta corta de su elección
• 3/4 tz de queso Cheddar rallado
• 3/4 tz de crema dulce
• 1/2 tz de leche
• 3 salchichas picadas (rodajas partidas en 4)
• 1 bróccoli pequeño cocinado, se saca del fuego unos minutos antes de que esté (como es una receta pesadilla, mejor hervirlo sin grasa y con poca sal)
• 1 cebolla pequeña picada
• 3 cdas de mostaza (yo uso Dijon en grano con vino blanco, lo venden en botella de vidior con las demás mostazas, y es excelente para usar en un montón de recetas)
• Sal y pimienta al gusto
• Pizca de paprika


Preparación:


1. Derretimos la mantequilla, se fríe en esta la cebolla.

2. Agregamos la mostaza y revolvemos bien.

3. Agregamos la leche y mezclamos todo cuidando que no queden grumos.


4. Agregamos el queso Cheddar rallado y la crema dulce. Salpimentamos.

5. Agregamos las salchicas y el bróccoli y dejamos que la salsa hierva y se condense revolviendo de vez en cuando para que no se pegue el fondo, si es necesario se espesa con un poquito de Maicena. Acá se termina de cocinar el brócoli.

6. Mientras la salsa se espesa, ponemos a hacer la pasta según las intrucciones del empaque.

Extra: Para hacer de esta receta una cacerola revolvemos la pasta con la salsa, lo pasamos a un pyrex, lo cubrimos con queso y un poco de pan rallado y lo llevamos al horno hasta que la salsa se vea hervir y el queso se derrita y dore un poquito.

Amo esta receta, se puede variar de todas las maneras posibles! Con otros quesos, tocineta, jamón, vegetariano con hongos y bróccoli, con pollo desmenuzado, y con lo que se les ocurra!!!

Y por cierto, recordé postear esta receta porque @Toolinabox me preguntó por platos con salchicha hace un par de días (pero he estado hasta el cuello en el trabajo, entonces aproveché anoche que llegué temprano a mi casa para buscarla y redactarla, perdón por no contestar antes!), y entonces saqué esta receta de la lista que tengo de pendientes. Que disfruten!

sábado, 17 de julio de 2010

Mokambo

Ccreo que ya les he contado antes en el post de Kracovia, que en donde yo trabajo se hacen almuerzos de estatus una vez al mes. Cada departamento hace una reunión-almuerzo para hablar sobre asuntos laborales. En el departamento en que yo trabajo por lo general escogemos un restaurante cercano y no-tan-caro para ir y comer rico, hablar de lo que tenemos que hablar pero también pasarla bien, porque todos somos amiguis.

En mayo fuimos a este lugar llamado Mokambo por recomendación de Paola (autoproclamada modelo oficial de Food JUNKY). Desde entonces he ido unas 3 veces.


Mokambo queda por la calle de la amargura. De Pizza Manía (yuck!) 100 m. este, en la pura esquina, frente al finado y extrañado restaurante El Semáforo (como me hace falta, de verdad...).

Es un restaurancito pequeño, de dos pisos pero con un menú bastante rico (aunque pequeño también). El primer piso en realidad no es tan lindo adentro, pero tiene un patio con plantas y mesas con sombrillas grandes que para mi le suma mil puntos.



También está el segundo piso, que es más como para cafecito porquelas mesas son pequeñas, y en general no son mesas de sentarse a comer (aunque estando lleno el resto del lugar, nos sentamos a comer ahí una vez).


La parte de arriba tiene una decoración bonita, "moderna" diría mi mamá, yo diría que es la parte más "caché" del restaurante y que de hecho es la imagen que sus dueños buscan del lugar al llamarlo Café & Lounge, el problema es que abajo es tan pequeño que no se logra.

Pues bueno, fuimos las 9 personas del departamento a comer, reservamos en el patio (como pueden ver en la foto de arriba, esas mesas pegadas somos nosotros) y nos trajeron el menú. De primera entrada lo que vi fueron los emparedados, que sonaban deliciosos y fuera de lo común (ahorita no me acuerdo exactamente, pero con infredientes como berenjena y prosciutto), y bueno, todos decidieron lo que querían, yo decidí relativamente rápido (porque por lo general me toma el doble que a los demás). Llegó la mesera y le pedí, "los emparedados solamente se sirven en la tarde"... es me da tanta chicha que no lo puedo explicar... y pensé "pero no pueden avisar eso cuando uno se sienta y le entregan el menú?" empezamos mal... Y bueno, revisé todos los platos (plato del día, pastas, ensaladas) y me decidí. Listo.

Las bebidas también se veían ricas, batidos de frutas naturales, todas las mujeres del grupo pedimos batido de fresa-kiwi, y se veía bellísimo! Lo mismo con el té frío de la casa.



Y pues bien, el batido estaba rico, pero no tanto. Preguntamos y nos dijeron que estaba hecho con frutas naturales, yo creo que el problema es que tenía más kiwi que fresa, y el kiwi le da un acidito que no me gustó tanto, en el momento recuerdo pensar que me sabía a Zero de kiwi.
El té frío si estaba delicioso, ahí no hay pero.
Del servicio no se qué decirles, la verdad es que la muchacha que nos atendió en momentos era graciosa, ese estilo de mesera confianzuda pero buena gente, pero se pasó de grosera en ocasiones, y algunas personas de nuestro grupo la escucharon decir comentarios despectivos de nosotros cuando estaban cerca de la cocina, todo malísimo. Como puede pasar una cosa así en un lugar en el que se depende casi al 100% del servicio al cliente? Es increíble, y lo peor es que no es cocina cocina, la cocina está en el segundo piso y se pasan las órdenes y platos por un elevadorcito, el lugar en el que están los meseros es una cocinita pequeña donde ser preparan los refrescos, etc. Es abierta y en un día lleno de gente a la hora de almuerzo ponerse a hablar mal de los clientes! O_O y el comentario además se debía a que éramos muchos, ni siquiera era que habíamos quebrado un vaso o algo así...

Pues bueno, a partir de ese momento ya estábamos un poco hartos de la mae, cero modales, pésimo servicio al cliente (y la cáscara de tener un tarrito para propinas a la par de la caja! pffft!)

La vida continúa, y la comida hace que valga la pena seguir hablando sobre el lugar (después de todo, yo volví a comer ahí).

Carlitos se pidió un plato del día, que es arroz, frijoles, ensalada, picadillo, plátanos y una carne de su elección (osea, un casado). Le costó ¢2.200 con fresco incluído (té frío, que debió venir en un vaso corriente, pero porque todos teníamos frescos en vasos fancy, se lo dieron fancy también, SAC suma un punto). A mi me pareció excelente que sirvieran los frijoles aparte porque a alguna gente les gusta el caldo revuelto en todo el plato, a otra no, y así cada uno elige como comerlo.



Karla (la patrona) se pidió una ensalada de atún: lechuga, tomate, cebolla morada, y bueno, acá pueden ver lo demás:


Me dijo que estaba maso, no tan rica pero no estaba fea. A mi las ensaladas no me hacen tanta gracia, y esta me parece que se ve muy linda con todos esos colores, pero como casi no me gustan, hasta ahí llega mi opinión.

Y bueno, las ensaladas casi no me gustan, pero la ensalada César SIEMPRE me encantó, desde la primera vez que la probé en un restaurante griego en el 2002 (es que yo soy de Tilarán, acuérdense, así que nunca en mis 17 años de vida había probado esa ensalada, no me juzguen que igual la gocé carajilla trepada en todos los árboles del mundo y atrapando guarasapos en las quebradas limpias del barrio, así que una por otra). No suelo pedir ensaladas en los restaurantes, me gusta hacérmelas yo, pero por la presión de haber escogido un emparedado que no me podían servir y el que ya todos los demás había pedido su comida, me pedí la ensalada César con salmón (Sylvia y yo la pedimos).


La verdad si estuvo muy bien, los crutones ya estaban un poquito suaves cuando llegó, pero el pescado calientito y crujiente, en buena cantidad, pedacitos gordos y suficiente aderezo. La volvería a pedir, de verdad que si!

Después Evelyn, Pao y Luis se pidieron la Bolognesa:


Evelyn me dijo que le había parecido super deliciosa, yo la probé y no me gustó tanto. Buena cantidad de salsa, el pan tostado y caliente, muy rico, pero la salsa me supo un poco a salsa de paquete. Y yo también uso salsas de paquete de base muchas veces, pero me esfuerzo en trabajarlas para que tengan un sabor casero, esta creo que no lo logró para mi.

Lena pidió Pasta al Pesto , y para ser sincera, fue mi plato favorito!


No es realmente pasta al pesto, es una salsa de pesto que no es lo mismo, y para serles sincera es de las cosas más ricas que he probado. La amé y me odié un poco a mi misma por no habera pedido y tener que conformarme con una probadita (aunque lástima las hojas de albahaca negras de adorno... mejor no haberle puesto nada). La segunda vez que fui al restaurante pedí exactamente esa pasta, y me dijeron que no había... a la hora de almuerzo que casi sólo sirven pastas! Pero después la misma mesera de la vez pasada, de quien esta vez no tengo ninguna queja, me dijo que había suficiente para un plato, excelente! El problema es que no estuvo tan rica, sabía mucho menos a albahaca y estaba leve salada, pero me imagino que es que hicieron el esfuerzo de que fuese suficiente para un plato, y por eso estaba diluida (y por cierto, esa vez si me dijeron cuando me senté que los emparedados eran sólo en la tarde =D).

Oscar se pidió un Alfredo de Camarones:


Por mucho tiempo este fue mi plato favorito en el mundo. Lo probé en un restaurante también en el 2002 que se llamaba La vie en France, costaba $11 el desgraciado y los servían con 6 camarones gigantes. El restaurante estaba en Chicago, y casi lloro la última vez que fui al ver que lo habían cerrado...

Acá en Mokambo claramente los camarones no eran tan grandes, pero si eran bastantes. La salsa  rica, no demasiado salada, la pasta bien cocida. La tercera vez que fui me pedí ese mismo plato, y esta vez no le pusieron las hojas de albahaca negras y feas. Creo que es el plato que voy a seguir pidiendo, no siempre, pero cuando me quiera ir a la segura, aunque tengo que volver en la tarde por un emparedado de prosciutto!

También venden cositas de panadería, yo no probé ninguna porque no me cabía ni un sorbo de agua, pero para tomar café se ven bien.


En resumen, supongo que el SAC depende del humor de la mesera ese día, y podría estar entre regular y malo. La comida es rica y barata, en algunos casos excepcional (como la Pasta al Pesto).

Rico, tranquilo y lo suficientemente alejado de la pura calle de la amargura para sentirse que se está en otro lugar.

Yo volví y seguiré volviendo.

 
Update: Paola se pidió una Ensalada César con pollo, no una Pasta Bolognesa, mis disculpas por el error. Además me recordó la señorita Lena que entre las cosas inapropiadas de la mesera, se quejó con ella porque andaba de goma.

miércoles, 14 de julio de 2010

Cheesecake de mantequilla de maní

No se ustedes, pero yo cuando oigo la palabra "cheesecake" empiezo a salivar como desquiciada! Y con esta foto más!


Yo pasé un tiempillo viviendo con una tía en Chicago, y ahí hay un lugar que se llama "Baker's Square" en donde hacen el mejor cheesecake que he probado en mi vida! Y de verdad, estoy segura de que si lo había hecho, pero no recuerdo haber probado cheesecake alguno antes de ese.

Pues a partir de ese momento me enamoré de este exquisito postre, con esa textura cremosita y la base crujiente... Y mi favorito es el cheesecake original, pero este tipo de recetas con sabores variados me encantan!

Esta receta me la encontré buscando recetas de chocolate con mantequilla de maní, porque tengo una debilidad para esos ingredientes juntos y separados, y me la encontré en una página de recetas de una marca de chocolates con mantequilla de maní, pero le hice un par de variaciones para acomodarla así.

Me mata de lo deliciosa, y para que vea que es verdad, la primera vez que la hice fue este viernes pasado, y el domingo la volví a hacer para llevar a la oficina, porque me pareció tan rica que TUVE que hacerla!

Aconsejadísima, aunque después de hacerla van a tener que salir a darse una corridita por el barrio o por lo menos un par de abdominales!


Ingredientes:
Con esto me van tener que perdonar leve porque no medí muy bien lo que estaba usando, así que ultimadamente lo importante es que le vayan probando el sabor de la mantequilla de maní y azúcar y ajustando al gusto de cada quien.

• 9 paquetitos de galletas Oreo
• 120 gr. más o menos de maní sin sal
• 1/2 barra de margarina
• 560 gr. de queso crema (yo usé queso crema light Monteverde, un tarro grande de 450 gr. y medio pequeño de 220 gr.)
• 3 huevos
• 2 tzs de azúcar morena (o tapa de dulce rallada o azúcar normal, en ese orden de preferencia)
• 3/4 tz de mantequilla de maní cremosa
• 2 cdtas vainilla
• 1/2 tz de crema chantillí (pueden usar de la que viene preparada para helados, o hacer con crema dulce, o usar unos paquetitos que vende en polvo, sólo se agrega leche y se bate, no es la más rica pero saca del apuro y es bastante fácil de hacer. Lo que sobra lo hacen en batido o mousse o se lo ponen a unos buenos helados =P)
• 100-150 gr. chocolate (amargo, con leche o como gusten) (opcional)

Preparación:


1. Triturar bien las galletas enteras y el maní, derretir la mantequilla y mezclarlo todo.

2. Con una cuchara aplastar esa mezcla para cubrir el fondo y paredes de un pyrex de 13" x 9".

3. Estos son Ale y Sandy, ellos me ayudaron un montón con la receta la primera vez que la hicimos. Sandy cumplió años ayer (13 de julio), salúdenla y de una vez la presionan para que me pase la receta de la crema de ayote tan deliciosa que me debe desde hace casi un año (vean que la quiero para el blog, así que al presionarla lo hacen para el beneficio de todos).


4. Batir el queso crema hasta que esté cremosito y suave. Agregar los huevos uno por uno mezclando bien entre huevo y huevo.

5. Agregar la mantequilla de maní, azúcar morena, chantillí y vainilla y batir bien.

6. Triturar el chocolate en trozos al gusto y mezclarlo gentilmente con una espátula dentro de la mezcla (opcional).


7. Vertir la mezcla dentro del pyrex con la base de galleta.

8. Hornear por 1 hora y media a 275ºF, hasta que esté doradito y se vea firme. Pueden probar con el toque del cuchillo en el centro, pero le quita mucho glamour el que quede con el gran hueco (como pueden ver en esta foto).

9. La primera vez que lo hice le puse trozos de chocolate Lindt de 90%, es amarguísimo pero deliciosísimo, pero como no a todo el mundo le gusta, la segunda vez le puse chispas de chocolate Hershey's, y en vez de revolverlas con la mezcla se las coloqué encima para decorar.

Me van a decir que no se les hace agua la boca con estas fotos? Yo es que creo que la mantequilla de maní es uno de los mejores inventos del hombre, y este postre me parece lo más cercano a la perfección que he visto en mi vida!

martes, 13 de julio de 2010

Cevichitos

Este es otro post rural, sobre una cevicherita en mi lejano Tilarán:


Y es que la semana pasada tuve que ir al pueblo  por razones fuera de mi control. Allá mi mamá nos mandó al chino a comprar arroz cantonés para todos, y mientras esperábamos el arroz dijo Vero (mi prima, la del post de Tierras Morenas): "Jale a buscar ceviche". Y fuimos a buscar ceviche ella, mi hermano y yo.

Primero fuimos a buscar en un barcito por la Iglesia, no había, ni modo. Pasamos por el bar Bambú (legítimo bar de colegiales y jóvenes tilaranenses desde que yo tengo memoria), y cerquita, para abajito, vimos "Cevichitos".

Justo lo que buscábamos.

 Vero y Ale

El lugar claramente chiquitito, con algunas mesas de madera con banquitos de salón de pueblo, una luz medio roja y un barco de madera colgando del techo.

El menú muy apetitoso:


Y nos pedimos 3 ceviches mixtos pequeños de ¢2.200 cada uno, dos con tortillas y uno con guineo.

Ni para qué decirles, es más, vean:


Unos camarones grandes (no gigantes) suaves y riquísimos, y en buena cantidad! El pescado super rico también. Hace mucho no me comía un ceviche, así que no se si será demasiado objetivo decir esto, pero de verdad uno de los ceviches más ricos que he probado.

Y era el pequeño, pero Vero no se lo pudo terminar (Ale se lo terminó por ella), yo me terminé el mío diciendo que Verónica es muy chapa por no poder con el de ella, pero en 15 minutos ya me estaba sintiéndo bien llena y para cuando llegué a la casa ni toqué el cantonés!

Yo creo que es una joyita de pueblo, que no existía cuando yo vivía ahí, pero a la que voy a volver cada vez que vaya.

Si pasan a Tilarán les recomiendo: una leche dormida en la soda El Nido (luego voy con cámara para hacer post), y un ceviche mixto en Cevichitos.

=P

lunes, 12 de julio de 2010

Pasta Primavera con pollo 400

Esta receta es bastante clásica, pero yo diría que lo más interesante que tiene es que con las medidas e ingredientes adecuados, tiene solamente 400 calorías!


Como ya seguro adivinaron, esta es una de las recetas de la dieta que hice hace unos meses con la que perdí casi 3 kilos en 1 mes, y que después subí 2 de esos kilos por culpa de todas las delicias del concurso de aniversario.

Pero bueno, la tenía ahí guardada y decidí que entre tanta receta gorda (especialmente por el cheesecake de mantequilla de maní que voy apublicar este miércoles). Yo creo que en la foto no se ve tan riquísma, y culpo de eso a la monotonía de colores de la pasta integral, el pollo y la salsa de tomate, pero de verdad que si es rica, y más importante, SALUDABLE! (y las cantidades son apenas para una dieta bien balanceada y con las calorías justas necesarias, aunque si quieren comer un poquito más -como yo claramente hice- adelante!)

Esta receta es para 2 porciones talladas.

Ingredientes:

• 1 tz de spaguetti integral cocinado
• 1 tz. de salsa de tomate para pasta
• 300 gr. de pechuga de pollo en pedacitos al gusto
• La verdura que gusten al vapor
• 1/2 tz de queso parmesano en polvo o rallado
• 2 tzs de brócoli al vapor

Preparación:


1. Se cocina el bróccoli al vapor. Yo lo hago en mi ollita arrocera de microhondas que es una salvatandas.

2. Se cocina la pasta integral y se reserva.

3. Se cocina el pollo con aceite en spray y un poquito de sal y luego se agrega el vegetal elegido (a menos de que sea enlatado, como maíz dulce. Si fuese así se agrega al final con la salsa).


4. Se agrega la salsa de tomate en la misma cantidad exacta que la cantidad de pasta.

5. Se revuelve todo y se condimenta al gusto (orégano, pimienta...) (agregar acá los vegetales enlatados de haberlos).

Más sencillo no puede ser, también es rico, bastante económico (aunque la pasta integral es más carilla), y de nuevo, con las calorías contadas y ajustadas.

Recuerden hacer sus meriendas a media mañana y media tarde!

domingo, 11 de julio de 2010

Donde el Ché

Bueno, esta reseña estaba haciendo fila desde hace tieeeempo!

Resulta que hace como 2 meses fui a Donde el Ché con mi amiga Lucía Castellón (que ahorita anda dándose un largo tour por Italia la desgraciada, y fue a la tumba de Toscanini).


 Donde el Ché es un restaurante argentino chuiquitito que queda por la U Latina en San Pedro, como entre la U Latina y Plaza del Sol, en un centrito comercial en el que han habido mil restaurantes que duran poco y cierran.

En fin, fuimos porque teníamos antojo de carne y Lu tenía una tarjeta que le daba 50% de descuento (pero ya pasó la promoción, aunque el Ché todavía saca el banner y lo pone por la puerta).

El lugar es chiquitillo, como ya les dije, tiene mesas afuera y adentro:


El problema con las meses de afuera es la bulla, está en la pura calle principal de San Pedro, entonces depende de la hora puede ponerse feo.

Ahora, decidimos ir porque la Lu ya había ido y me lo recomendó mucho, así que me vestí bien linda y nos vimos. La verdad yo también tenía antojo de carne, y mucho, y estaba muy emocionada por comer un montón! El problema fue que cuando abrí el menú para revisarlo decía "Ravioli con salsa de alcaparras" (más o menos ¢8.000 con impuestos). Yo quedé con los ojos abiertísimos imaginándome esa salsa de alcaparras deliciosísima y no lo pude soporta... y cometí un error: en un restaurante de carne pedí pasta...


Y bueno, pagué por mi error. La famosa salsa de alcaparras era una salsa de tomate común y corriente (y ni tan rica) con alcaparras. No es lo mismo, y me dio demasiada cólera que digan "salsa de alcaparras" cuando no lo es, y me lo comí sin ganas...Además, me pareció que el precio era exagerado!

Por otro lado, Lucía si es inteligente y se pidió un churrasco término medio (el precio casi igual, más o menos ¢8.000 con impuestos).


Una carne jugosita y deliciosa, con un sabor increible y un par de papas asadas y una ensaladota que me hicieron pensar que estaba en una parrillada en el campo. El tamaño tan gigante que hasta me pareció barato! El Ché saca la parrilla al frente del restaurante para cocinar, así que uno sabe que la carne está fresquita. y recién hecha, el problema es que al ser un restaurente de carne la gente (inteligente) pide carne, y es una sola parrilla y un sólo Ché, así que tardó su buen rato en estar, lo cual fue un poco molesto, especialmente porque a medio esperar nos decidimos pedir una empanada Argentina (por el hambre), y no nos la traían, y no nos la traían, y no no la traían... cuando le volvimos a decir a la muchacha que nos estaba atendiendo no escuchó de muy buena gana, e igual no nos la trajo. Al final la trajo con el resto de la comida y claramente la mandamos de vuelta, porque era una entrada. Ni modo, no quedé demasiado contenta con el servicio, aunque el Ché es muy amigable y me cae bien.

Nos comimos la comida con una copita de vino cada una y notamos el precio de las botellas de vino Frontera en el menú, y resulta que eran 2 veces el precio de las botellas extra grande de Frontera en Pricemart, que tienen como el doble del contenido (Lucía se fijó un día y me mandó un mensaje). No se si normalmente sea así, pero me parece exageradísima la inflación del precio, definitivamente no voy comprarme una botella de vino ahí nunca!

Y entonces no probé las empanadas, todo mal, pero según leí en Costa Rica Page's son deliciosísimas. Tendré que volver por ellas.

Después pedimos un postre, unos profiteroles de dulce de leche con helado:

Quedé también enamorada del sabor. El toque de los profiteroles es básicamente la pasta, y estaba riquísima. Apenas salada para combinar con helado, dulce de lente y chocolate. Si no es un postre por el que saldría corriendo al restaurante, siempre que vaya lo voy a pedir sin duda!

Al final la cuenta llegó con 50% de descuento, y pagamos por ahí de ¢6.000 cada una (perdón, perdí el recibo y no tengo los precios exactos...) con toda la comida, el vino y el postre, o sea, normalmente una comida saldría por ahí de ¢12.000 una comida por persona.

Es caro, eso si, pero si algún día estoy antojadísima de comer carne o si tengo la plata y quiero ir a comer rico, ahí es a donde me voy a ir a sentar, y voy a pedir el churrasco!

Invitados todos a ir (tomando en cuenta que hay que ir con platilla), y espero que cuando vayan me cuenten cómo les fué!

viernes, 9 de julio de 2010

Plátanos con fresa!

Este es un postre robado de un restarurante del cual todavía no les he contado:


Hace unos meses, varios... un montón la verdad, fuimos Lena, Karla, Pao y yo al vocán Poás. Fue un paseo que teníamos 300 años planeando (o desde noviembre del 2009) y nunca íbamos. Por fin un soleado 20 de febrero fuimos, y la pasamos super bien! Costó sacar a Pao de la cama porque estaba enferma y chineada, y además nos fuimos atrasando hasta que llegamos al volcán como a las 2, cuando cierran a las 3:30 p.m.

Pero bueno, en el post del restaurante propiamente les cuento sobre el paseo y subo unas foticas para que vean que lindo. Por si no han ido, deberían, yo nunca había ido, o que me acuerde, pero mi excusa es que soy de Tilarán.


Y bueno, fuimos a Freddo Fresas a almorzar y nos pedimos de postre unos plátanos al horno. Una cosa que no les puedo explicar la delicia! venían una capa de fresas y queso, y desde entonces he tenido la intención de hacerlas, pero nunca lo hice, hasta la semana antepasada que compré plátanos y fresas y queso tierno.

Pues para no hablar tanta paja, me quedaron mal... Puse los plátanos al horno con las fresas tajadeadas, y demás ingredientes (hasta leche condensada), y claramente los plátanos duraron más estando, y yo sabía que iba a pasar, y aún así los metí al horno... Pero entonces, los plátanos duraron más, entonces el queso se tostó más de la cuenta, y la leche condensada creció y se regó y se hizo un mielero quemado y etc. Las fresas además quedaron aguadas...

La semana pasada en cambio invité a comer a mi amiga de infancia Valeria. Hicimos entre mi hermano, ella y yo Pollo al Chipotle y de postre los platanitos.

Nada más les digo que me dijeron que quedaron más ricos que los del restaurante! jeje.

Y sin más ni menos, una receta que estoy segura que quien haga va a amar el resto de su vida:


Ingredientes:

• Plátanos tajadeados a lo largo (suficientes para cubrir el fondo del molde de su elección, yo usé 3)
• Queso que derrita al gusto (yo usé palmito, pero es mejor usar uno que se pueda rallar bien, como queso fresco, o turrialba, o mozzarella si les gusta más el sabor)
• 1/3 de tz de azúcar
• 3 cdas de mantequilla (o más al gusto)
• Leche condensada o miel de maple o miel de abeja o lo que le quieran hechar. Yo le puse caramelo de azúcar (la receta la posteo luego). Opcional, si quieren nada más con el azúcar es suficiente.

Mermelada:
• 3/4 de tz de agua
• Una cajita de fresas
• 3/4 tz de azúcar

Preparación:


1. Primero que todo tenemos que hacer una deliciosa mermelada de fresa. El asunto es que para esta receta las cantidades cambian para que quede bastante líquido, pero es lo mismo.

2. Colocamos en el molde para horno los plátanos, espolvoreamos con el azúcar, agregamos el exceso de líquido de la mermelada, la leche condensada o lo demás que le queramos poner, y la mantequilla.

3. Metemos al horno hasta que los plátanos estén cocinados. Duran su rato, como media hora, así que hay que alistarlos un buen tiempo antes de que se hayamos planeado comer.


4. Una vez que están cocinados y doraditos, ponemos el resto de la mermelada encima.

5. Por último, cubrimos con queso.

6. Y volvemos a meter al horno hasta que el queso se derrita y dore un poquitito.


Duran un poquito pero por mientras se hacer la mermelada y mientras se cocinan los plátanos, pero realmente es facilísimo y de muerte lenta!

domingo, 4 de julio de 2010

Parmesana

Esta receta es parecida a la Musaka en el sentido de que son como lasañas de berenjena, pero el sabor es muy diferente, además de que es vegetariana.


Yo se que no se ve como una lasaña, pero es porque yo soy un desorden sirviendo estas carajadas, pero les juro que es un puro sabor!

Tuvo muy buenas críticas entre quienes lo probaron y el sabor es muy particular, por el limón, y muy agradable.

Ingredientes:
• 2 berenjenas
• 100 gr. de queso parmesano
• 100 gr. de queso mozzarella
• 1 tz de jugo de limón
• 300 gr. de pasta de tomate
• Sal y pimienta al gusto
• 6 hojas de albahaca fresca
• 250 gr. de harina
• aceite para freir


Preparación:


1. Cortar las berenjenas en rodajas más o menos delgadas.

2. Mezclar el jugo de limón con la sal y la pimienta. Pasar las berenjenas por el limón.

3. Pasarlas por la harina y freirlas en aceite hasta que estén doraditas. Sacarlas y escurrirles el aceite en papel toalla.


4.  En un molde para horno (preferiblemente cuadrado, aunque yo usé redondo) colocar una capa de pasta y una de berenjena.

5. Continuar con otra capa de pasta de tomate, la mitad del queso mozzarella y la mitad de hojas de albahaca. Repita berenjena + salsa de tomate + queso mozzarella + albahaca, y por último berenjena + salsa de tomate + queso parmesano.

6. Poner en el horno a 360ºF por 15 minutos. Servir caliente.


El sabor del limón es sorprendemente fuerte, se le pega muy bien a la berenjena y, como dije antes, le da un toque muy especial, disfruten!